Religión

'El balance de 7 años es positivo': Bertone

2013-09-02

"Siempre he dado lo máximo, pero claramente tengo mis defectos y si tuviera que pensar...

Roma. (Zenit.org).- El cardenal Tarcisio Bertone, en el marco de la visita a la ciudad de Siracusa, en la celebración de los 60 años del prodigio de la lacrimación de un cuadro de la Virgen, consideró  'positivo' el balance del trabajo desarrollado en la Secretaría de Estado durante estos siete años, indicó la agencia de noticias Ansa.

En la homilía de la celebración, el cardenal recordó las "imagenes terribles que el papa Francisco ha indicado, pronunciando un fuerte apelo por la paz en Siria y en el mundo". Indicó que las lágrimas de María asumen un significado especial para los fieles, que manifiesta la compasión de Dios. Recordó que las lágrimas de María son como una medicina para la memoria, contra la idolatría del presente, una medicina que nos ayuda a tener una mirada llena de esperanza hacia el futuro. Una mirada de fe para estar listos a la conversión y dóciles al Espíritu.

Al salir del templo, interrogado por los periodistas allí presentes, el cardenal consideró que "el balance de estos siete años es positivo. Naturalmente existieron tantos problemas, especialmente en los dos últimos años, me han hecho acusaciones... un entrelazarse de cuervos y serpientes.. Pero esto no debería ofuscar lo que considero sea un balance positivo".

Y añadió: "Siempre he dado lo máximo, pero claramente tengo mis defectos y si tuviera que pensar ahora, en ciertos momentos habría actuado diversamente".

El purpurado subrayó las líneas guías de su servicio en la Secretaría de Estado: la relación armónica entre fe y razón, entre derecho y ley natural, entre tradición y modernidad. Y recordó algunos eventos memorables como las Jornadas Mundiales de la Juventud en Sydney y Madrid con Benedicto XVI y ahora en Río de Janeiro con el papa Francisco.

Los analistas consideran que el nuevo secretario de Estado, el arzobispo Pietro Parolín, actual nuncio apostólico en Venezuela, que entrará en funciones el 15 de octubre, tendrá un rol más centrado en la dimensión internacional, y que habrá más colegialidad entre el papa y los dicasterios, sin que el secretario de estado tenga necesidad de ser el principal nexo de unión.

Benedicto XVI rechazó en el 2009 la primera renuncia por motivos de edad presentada por el cardenal Bertone, e indicó que no quería "renunciar a la preciosa colaboración" del purpurado.

Incluso después de la fuga de documentos reservados del Vaticano, el llamado vatileaks, en cuyos textos aparecía varias veces el nombre del secretario de estado, el papa Ratzinger reiteró su confianza en el secretario.



KC